El pasado día 21 de noviembre se celebraba el Día Mundial de la Televisión. Más allá de la perdida de audiencia que la televisión tradicional viene padeciendo desde hace ya algunos años por la llegada de la televisión online y otros formatos como la televisión a la carta, con los que compite directamente, lo cierto es que aún retiene a un público muy concreto y continúa buscando formas de reinventarse.
Es también un hecho que dentro del panorama global de la publicidad, las audiencias se han ido fragmentando y ocupando diversos nichos a los que es más complicado llegar si no se conocen cuáles son las plataformas y estrategias correctas para hacerlo. De hecho, el estudio Digital Sentiment Survey 2022 de McKinsey & Company, indica que el 73% de las interacciones de los consumidores en España se hace ya de manera digital a través de plataformas como Instagram, TikTok, Twitter o Twitch.
Unida a esta situación, la inversión publicitaria también ha decaído a favor de las plataformas digitales, donde se realiza el grueso de las campañas de marketing. Además, formatos como la televisión conectada comienzan a ganar una mayor importancia dentro de los medios digitales, convirtiéndose en la categoría que más crecimiento registra, según indica IAB Spain en su informe del pasado mes de octubre.
Como podemos observar los paradigmas de inversión en publicidad cambian constantemente como reacción al comportamiento de las audiencias. Sin lugar a dudas ahora nos encontramos con una gran fragmentación en este sentido y las marcas deben ser muy cuidadosas al momento de decidir a dónde irá destinado su presupuesto de marketing. Para ello es necesario diversificar los contenidos pero tener siempre en cuenta a qué público se quieren dirigir y establecer una estrategia clara y precisa en torno a ello.
Cada marca tiene sus necesidades y su público, y por ello, las campañas de marketing deben ir enfocadas a aquellos nichos de audiencia que sean más susceptibles de comprar su producto. Sin embargo, como venimos viendo, la fragmentación del público es, en el panorama actual, bastante amplia, por lo que las marcas deberán incidir sobre diversas plataformas y crear diversas estrategias que les permitan llegar a segmentos muy concretos.
Desde LeanFactor sabemos que es esencial definir cada campaña publicitaria y los objetivos que buscan alcanzarse. Nuestros servicios son completamente integrales y transversales, apostando por un modelo en el que conviven no solo diferentes formatos (prensa escrita, audiovisual, etc.) sino también, diversas disciplinas (PR, marketing digital, redes sociales, etc.). Esto hace que contemos con una visión muy amplia sobre el panorama del marketing y la publicidad y sepamos de qué manera conseguir llegar a determinadas audiencias y mediante qué plataformas y medios.
Llevar a cabo una campaña en redes sociales, por ejemplo, implica desde el primer momento elegir qué plataformas vamos a utilizar dependiendo de los mensajes que queramos difundir, del sector al que pertenezca nuestra marca y hacia qué publico queremos enfocarnos; y no solo eso, sino que también tendremos que adaptar nuestros mensajes a los formatos específicos de comunicación que requiere cada red social. Por otra parte, y de manera muy distinta, si decidimos hacer marketing de buscadores, tendremos que ver cuáles son nuestras opciones; si queremos resultados a corto plazo tendremos que invertir en SEM, con formatos ágiles y audiencias muy específicas, sin embargo, si nos enfocamos al largo plazo, nuestra mejor opción será el SEO, para lo que tendremos que invertir el tiempo necesario en optimizar nuestra página web.
Hay que tener en cuenta que cada campaña y cada disciplina busca objetivos muy distintos. Si queremos obtener publicidad de los medios de manera orgánica nuestra mejor opción será llevar a cabo acciones de PR. Aunque esta modalidad dentro del marketing generalmente permea más dentro de los medios verticales, debido a las comunicaciones corporativas, si somos lo suficientemente astutos podemos aprovechar tendencias de actualidad para expandir nuestros mensajes a través de media alerts que tengan el impulso suficiente para generar una cobertura orgánica en medios generalistas con una gran audiencia.
Como se aprecia, las herramientas son muy variadas, y las marcas deberán decidir cuáles de ellas utilizar para conseguir sus objetivos de la forma más precisa posible. Dentro de un contexto tan diversificado, la publicidad debe reorientarse hacia la consecución de audiencias muy fragmentadas a través de diversas plataformas, centrándose en la amplitud de sus mensajes, la bidireccionalidad de la comunicación y la cuantificación de los resultados.